En un mundo saturado de ruido, donde las voces se pierden en una multitud desconectada de sí misma y cuyos miembros permanecen incomunicados a pesar de compartir los mismos espacios, la revista LA VEZ se alza como un refugio colectivo de intercambio de saberes y experiencias por y para los vecinos y las vecinas de Madrid. 

Como miembros de la asociación NO DAMOS ABASTO, defendemos necesidades que creemos olvidadas: parar, escuchar, entender, conocer y compartir; valores presentes en comunidades sólidas que, sin embargo, consideramos amenazados por el irrefrenable ritmo de vida capitalista de la ciudad.

De este modo, ponemos en valor la memoria de los mercados de abastos tradicionales como estos lugares de encuentro e intercambio vecinal, propios de una vida más pausada, basada en la confianza y el apoyo mutuo dentro de una comunidad. Pedir la vez es un símbolo claro de esta confianza compartida, un llamado a vivir y habitar de manera consciente y con propósito. 

La vez inicia una conversación y, a través de la palabra, encontramos la manera de organizarnos y construir comunidad. Con la vez tomamos conciencia del lugar que ocupa quien nos precede, de cuál es nuestro propio sitio y de dónde se incorporará quien venga después. Es una forma de tomar conciencia de la responsabilidad comunitaria, de reconocer lo que somos y lo que podríamos llegar a ser en un mundo donde la colectividad es el único motor del cambio. 

Desde LA VEZ, compartimos el compromiso de ofrecer una plataforma atenta a la memoria de las comunidades en los mercados, recuperando un modelo de consumo sostenible anterior a la gentrificación y al peso del sector servicios, que ha transformado por completo estos espacios. Invitamos a valorar lo que se esconde en cada instante, en cada persona y en cada historia para celebrar la vida tal y como es: diversa, cambiante, incierta, pero profundamente conectada

Como revista, nos presentamos como un espacio donde las ideas y las experiencias se cruzan, al igual que en el pasado en el mercado tradicional. Aquí, el pensamiento crítico y la responsabilidad colectiva se juntan con el fin de reflexionar sin prisas y sin miedo a la contradicción. Buscamos no sólo narrar el cambio que han experimentado los mercados, sino resignificarlo y adaptarlo a las necesidades de conexión y comunicación del presente.

En LA VEZ, cada persona importa, cada historia tiene un lugar. Creemos en la palabra como punto de encuentro, en la memoria como guía y en la comunidad como camino. La responsabilidad es compartida y la abundancia, colectiva.